La era de los ordenadores personales (1990-2000)
La era de los ordenadores personales (1990-2000): Un salto hacia la informática doméstica
¿Cuáles fueron los primeros ordenadores personales?
En la siguiente imagen podrás visualizar los ordenadores que estuvieron saliendo al mercado en gran escala desde el año 1974.
¿Cuál fue el primer ordenador personal?
Blankenbaker convirtió el garaje de su casa en Kenbak Corporation y construyó el Kenbak-1. Como este ordenador nació antes que el primer microprocesador, en su interior no tenía un CPU como tal, sino estaba compuesto de una placa de circuito impreso con circuitos integrados de pequeña y mediana escala y dos registros de tipo MOS para la memoria e interruptores.
La configuración de hardware del Kenbak-1 tenía 256 bytes de memoria y alcanzaba una velocidad equivalente a 1 MHz. A diferencia de los ordenadores que llegaron más adelante, este no mostraba imágenes, sino que se utilizaba con código máquina a través de una serie de botones e interruptores. La salida de información consistía en una fila de luces.
La creación de los microprocesadores
En 1969 un fabricante de calculadoras japonés encargó al fabricante de componentes electrónicos Intel un circuito integrado para sus calculadoras. Pero Intel se dio cuenta de que si utilizaban los procesos de siempre para realizar ese circuito, las calculadoras saldrían tan caras como los miniordenadores de aquella época y no tendrían la capacidad de éstos.
Decidieron que había que plantear otra cosa. Pensaron que era mejor hacer un chip programable que tuviera las funciones de una calculadora en vez de conectar dentro del chip los circuitos lógicos de la calculadora. Es decir, decidieron hacer un ordenador en un pequeño bloque de silicio, lo que hoy llamamos un microprocesador. Llamaron 4004 al nuevo componente, ya que ese era el número de transistores que reemplazaría.
Microprocesador Intel 4004. Nació para ser el cerebro de una calculadora y se convirtió en el primer microprocesador de propósito general, que era tan potente como los gigantescos ordenadores de antaño.
Sin embargo, a Intel le surgía un nuevo problema, pues iba a poner en manos de los japoneses un gran cambio tecnológico cualitativo a un precio muy bajo. Lo solucionaron rápidamente, ya que, de todos modos, los japoneses no se dieron cuenta de la importancia del cambio y renunciaron a los derechos exclusivos con tal de conseguir un precio algo más barato. Después, basándose en aquel 4004, Intel creó otro microprocesador llamado 8008 para la casa Computer Terminal Corporation (CTC), pero sin perder los derechos para venderlo a otros clientes.
Los primeros sistemas operativos
El primer paso fue crear lenguajes y programas para los microprocesadores, porque si no éstos no servían. Así nació el primer sistema operativo para microprocesadores llamado CP/M. Con estos dos elementos se abría el camino para la creación del primer ordenador personal.
Este ordenador Osborne de 1981 utilizaba el sistema operativo CP/M y tenía un monitor de 5 pulgadas.
Popularización de los ordenadores personales
El inicio de los años 90 vio el advenimiento del CD-ROM como estándar de la industria, y hacia mediados de la década, casi todos los ordenadores de escritorio lo incorporaban, y hacia finales de la década, también las laptops. La accesibilidad y la reducción de costos, junto con la mejora de la tecnología y la aparición de internet, contribuyeron significativamente a su popularización. Empresas como IBM y Apple lideraron el mercado, con IBM introduciendo su primer ordenador personal en 1981, el IBM PC, que se popularizó rápidamente.
La velocidad y capacidad de los procesadores mejoraron notablemente durante esta década. La arquitectura de los procesadores evolucionó, aumentando el número de núcleos e hilos, lo que permitió un rendimiento más rápido y eficiente en tareas complejas como la edición de video y el diseño gráfico. Estas mejoras fueron posibles gracias a avances en la miniaturización de los componentes y la optimización del software.
Impacto de la Ley de Moore
La Ley de Moore, formulada por Gordon Moore en 1965, predijo que la cantidad de transistores en un microchip se duplicaría aproximadamente cada dos años, lo que llevó a un aumento exponencial en la capacidad de procesamiento de los dispositivos electrónicos. Esta ley no solo impulsó el desarrollo de dispositivos más potentes y eficientes sino que también permitió avances en campos como la inteligencia artificial y la computación en la nube.
Conclusión
La era de los ordenadores personales entre 1990 y 2000 fue una época de transición y crecimiento exponencial. La informática doméstica se convirtió en una realidad, y la Ley de Moore aseguró que el rendimiento de los ordenadores continuara mejorando año tras año. Este período sentó las bases para la tecnología que disfrutamos hoy y continuará influyendo en las innovaciones del futuro.
Comentarios
Publicar un comentario